*Inicial cambio*

Hay algo extraño ya en tu voz... Hay algo raro que iluminas al mirar. Concebir tus manos y frenar al rumiar Me hace saber que ya no correspondes a un amar Actúas por no distinguirme al retornar. Lógico causar fatiga al abatir dos almas casi deprimidas Aunque nunca fuiste el señorío que añore; Hasta el instante culminante retribuiré lo que me dejaste. Y el frenar aceleradamente Defenderé sauces gestantes de pirámides retornantes. Cercano y lejano... Paradisíaco cuerpo despojado No acaba mis clavarios sus besos son mas que lejanos… Sus miradas se ven disfrazadas... Y nuevamente su cuerpo se ve deleitándose bajo lejanas sabanas moradas Mientras estas mañanas se ven matizadas de rojo pasión y negro dolor Rojo candido y Negro sombrío Colores más que incoloros sobre pequeños agobios Solo se renace con quien te guste; Pues si, y yo ni puede ni hacerlo ni con el pensamiento Por que de él, sus besos… Sus caricias, Y su amor apaciguador; Se haya presente en todo mí alrededor Es como un justiciero Precoz, flagelador! Y como flagelo en su invierno